Constantemente estamos expuestos a sustancias tóxicas que están presentes en nuestras casas, en materiales de construcción y decoración, productos de limpieza, pesticidas domésticos, ambientadores, productos de aseo e higiene personal, aislantes, pinturas, recubrimientos, plásticos, agua del grifo, alimentos y muchos otros más. Este grave problema ha sido causado fundamentalmente por el ineficiente control que ha prevalecido en el ámbito de la comercialización y el diseño de productos químicos para limpieza. Muchas empresas de limpieza, conscientes del problema, han recurrido a la utilización de productos biodegradables que no sean tan agresivos para el medio ambiente y para nuestra salud.
La Organización Mundial de la Salud cree que el 23% de la mortalidad en el mundo se debe a factores ambientales. Concretamente el cáncer, se debe en un 90% de los casos a factores ambientales, y lo que es más importante, que una gran parte de ellos son evitables con buenos hábitos de vida y entornos saludables.
La exposición a sustancias químicas tóxicas es uno de los principales factores ambientales que pueden perjudicar a la salud de los seres humanos. Muchas de las sustancias tóxicas más preocupantes están presentes como contaminantes en los hogares.
Los productos biodegradables son sustancias que pueden descomponerse en elementos químicos naturales por la acción de agentes biológicos, como el agua, las bacterias, el sol, las plantas o los animales. En consecuencia todas las sustancias son biodegradables, la diferencia está en el tiempo que tardan los agentes biológicos en descomponerlas en químicos naturales, ya que todos forman parte de la naturaleza. La característica principal de los biodegradables es poder ser utilizadas como sustrato por microorganismos. Éstos las emplean para producir energía (por respiración celular) y crear otras sustancias como nuevos tejidos, nuevos organismos y aminoácidos.
La biodegradación puede emplearse para la eliminación de ciertos contaminantes como papel, hidrocarburos, desechos orgánicos urbanos, etc. No obstante en vertidos que presenten materia biodegradable estos tratamientos pueden no ser efectivos si nos encontramos con otras sustancias como metales pesados, o si el medio tiene un pH extremo. En estos casos se hace necesario un tratamiento previo que deje el vertido en unas condiciones en la que las bacterias puedan realizar su función a una velocidad aceptable.
Es importante que al momento de dar o solicitar un servicio de limpieza se tenga la información oportuna sobre qué tipo de sustancias se utilizan para brindar el mantenimiento. La limpieza y la higiene es un tema de todos.